El director deportivo del Club Deportivo Mensajero, Guille Jiménez, analiza el momento del equipo, días después de que concluyera el mercado de fichajes invernal. Los rojinegros, con Josu Uribe en el banquillo, lograron una necesaria victoria ante la UD San Fernando (2-0). En el derbi regional participaron tres de los cuatro refuerzos –Diego Simón entró en la convocatoria pero no llegó a debutar-. “El equipo estará donde quiera su masa social”, apunta el dirigente capitalino.
Recuperar el Silvestre Carrillo
El feudo del barranco de Los Dolores no ha sido el fortín que acostumbraba. Guille Jiménez tilda de “punto débil” el haber dejado escapar tantos puntos en el Silvestre Carrillo (20 de los 33 disputados). “Ante el San Fernando sumamos tres puntos muy importantes para volver a meternos en la pelea y enganchar a la gente. En casa tenemos que ser muy agresivos, capaces de dejar la puerta a cero y mostrar contundencia”, comienza diciendo a los medios oficiales del club.
Cambio de entrenador
“Relevar a Yurguen (Hernández) fue una decisión difícil. Él es un gran entrenador; no en vano, fue el que consiguió ascender al equipo a Segunda RFEF”, analiza Guille, quien consideró, junto a la directiva, que el Mensajero “necesitaba un cambio. Nosotros siempre tenemos que mirar por el bienestar de la entidad y poner todo de nuestra parte para conseguir la permanencia”, señala.
Con respecto a la elección de Josu Uribe como nuevo entrenador, Jiménez revela que se debe a la necesidad de elegir a un profesional que “conociera el equipo y la categoría. En su primera etapa con nosotros, salió con muy buen sabor de boca; desde el primer momento, en aquel partido contra el Fuenlabrada, conectó con la afición”, aduce.
“Josu es un motivador nato; en su momento, nos hizo ganar en campos de ‘play-off’ como el Salto del Caballo (Toledo) y el Stadium Gal (Real Unión de Irún). Estoy convencido de que vamos a conseguir el objetivo”, reivindica.
Mercado invernal
La lesión de Jesús Valentín en el partido de Copa del Rey frente al Real Zaragoza, lo condicionó todo. “Fue un trastoque que nos obligó a hacer reajustes para no gastar más de lo que habíamos presupuestado en un inicio. Hemos tenido que hacer muchos movimientos para poder suplirlo (por Jesús Valentín)”, refrenda el director deportivo.
Guille muestra confianza plena en que las cuatro incorporaciones –Toni Robaina, Álex García, Alain Arreitunandia y Diego Simón- “aportarán mucho al equipo. También hemos dejado una ficha libre por lo que pueda pasar de aquí al final con algún jugador que esté en el paro”, puntualiza.
Catorce finales
Después de hacerse con “tres puntos importantísimos”, Jiménez reconoce que, desde ahora y hasta el final de temporada, “todos los partidos son finales. Empezaremos por una salida complicada al Montijo, plantel que ha sido la revelación de la temporada”, sentencia el ‘manager’, quien recuerda que el Mensajero ya fue capaz de ganarle a la escuadra extremeña. “Tenemos que ir con toda la ilusión y ganas del mundo para traernos los tres puntos a La Palma”, dice.
El jugador número 12
“El Mensajero estará donde quiera su masa social”, así de claro se muestra Guille Jiménez, quien entiende que la afición “haya estado molesta de aquí para atrás. Yo también lo he estado. Lo que está claro es que nos ha costado cuatro años volver a esta categoría. Lo tenemos al alcance de la mano; es momento de creer y estar todos unidos”, concluye el arquitecto del proyecto de la nodriza rojinegra.
