Si algo ha caracterizado siempre a Pacuco Rosales es su carácter; un espíritu ganador innato que le ha llevado a cosechar éxitos allá donde ha ido. El entrenador grancanario dirigió al Mensajero más recordado de todos los tiempos. Un equipo que finalizó en segunda posición de su grupo en Segunda B y que llegó con opciones de ascender a Segunda A a la última jornada de la liguilla.